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Bienestar Colsanitas

La experiencia me dice... los riñones

En el Día Mundial del Riñón, conversamos con Hernando Giovannetti, Director Médico de la Unidad Renal de Sanitas sobre los conocimientos básicos que debe tener a la hora de cuidar sus riñones.

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l agua es el fundamento de la vida. De ella depende hasta la más elemental forma viviente del planeta. El cuerpo humano es casi 60% agua y los riñones se encargan de mantener la cantidad exacta que cada organismo necesita. Por eso, cuando hay deterioro en la función renal pueden aparecer edemas en los párpados y tobillos, por el agua que el riñón no alcanza a procesar y que se acumula en el cuerpo.

Los riñones también mantienen el equilibrio de la sal, que es la principal fuente de sodio y cloro, y regulan el ácido que produce el organismo, pues la sangre debe tener un pH exacto para cumplir sus tareas. Además hacen el metabolismo de electrolitos como el calcio, el fósforo y el magnesio, y producen hormonas, entre ellas una indispensable para evitar la anemia y otra que ayuda a conservar el calcio de los huesos. Para hacer esto los riñones trabajan las 24 horas y filtran 1.800 litros de sangre, con lo que producen algo menos de dos litros de orina al día.

EXPERIENCIA RIÑÓN CUERPOTEXTO NUEVO
*Tomar agua en exceso no mejora la salud del riñon, sólo la necesitan en abundancia quienes tienen cálculos.

Cuando el riñón deja de funcionar hay que limpiar la sangre mediante diálisis: un filtro externo que reduce el exceso de sal, elimina las toxinas y mantiene la acidez apropiada de la sangre. Otra alternativa es el trasplante de riñón.

Las enfermedades renales son silenciosas: no dan señales claras de alerta hasta cuando están avanzadas, y por eso hay que ir al médico si hay espuma abundante en la orina o cambios en su color, que normalmente es entre amarillo y dorado; cuando la orina se vuelve muy oscura o anaranjada puede indicar presencia de sangre; o cuando observe edema permanente en los párpados e hinchazón de los tobillos. Las infecciones urinarias altas se deben tratar a tiempo, si se repiten pueden acelerar los procesos de daño del riñón.

La actividad física regular es importante y mejora el funcionamiento del riñón, pero solo tiene efecto si se hace al menos tres veces por semana durante media hora, ya que las sustancias que se liberan con el ejercicio y son útiles para mantener la adecuada oxigenación del cerebro, el corazón y los riñones tienen una vida media corta. Por eso el ejercicio de fin de semana o de alto impacto, pero de solo un día o dos a la semana, no es suficiente.

No se automedique en ningún caso. Medicamentos comunes como antibióticos, antiinflamatorios y algunos analgésicos pueden enfermar el riñón cuando no son usados siguiendo las indicaciones precisas de un médico.

Se cree que todo dolor en la espalda baja se relaciona con problemas del riñón, pero éste sólo duele de forma aguda en casos extremos: infarto del riñón, cálculos, obstrucción, infección severa o un quiste. Ni los calambres, ni las ojeras, ni la hinchazón de los pies en clima caliente son señales de enfermedad renal. La orina tiene un olor y un color característicos, el olor puede volverse más amoniacal y el color más intenso dependiendo de la cantidad de agua que se consume y de ciertos medicamentos, pero esto no es señal de alarma. Tomar agua en exceso no mejora la salud del riñón, sólo la necesitan en abundancia quienes tienen cálculos.

La dieta saludable es la mejor forma de cuidar los riñones: ya que la enfermedad renal suele ser silenciosa, es mejor consumir poca sal, en especial si hay antecedentes familiares de hipertensión. Y toca evitar las grasas saturadas, pues la carga de ácidos grasos saturados no solo afecta las arterias, sino que refuerza la hipertensión como factor de riesgo y el riñón sufre el impacto. Las personas con diabetes deben seguir una dieta muy baja en harinas y con cero azúcar refinada. Un poco más de la tercera parte de los pacientes con enfermedad renal severa son diabéticos e hipertensos, y por esta razón requieren seguimiento médico frecuente. 

  

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Katherine Ríos

Escritora. Autora del libro Los abrazos de Alicia (Editorial Robot).